Palito, cuentos descerebrados
Patricia Suárez
Palito, cuentos descerebrados es un libro de cuentos que desacomoda, que incomoda. Incomoda desde lo cotidiano, desde lo tangible que es, desde lo cercano que se nos hace y lo mucho que desconcierta pensar en lo cercano que es. La mayoría de los personajes aparecen como viejos conocidos de nuestro barrio, de esa gente que nos cruzamos de vez en cuando, pero en la que no reparamos mientras no se nos obligue a hacerlo. Y ahora que entramos en contacto con ellos, ahora que leemos la vida de las personas moldeadas por Patricia Suárez y nos hundimos en sus situaciones y sus hábitos, entendemos un poco mejor por qué nos resulta tan sutilmente perturbador, tan adictivo. De pronto los entendemos, entendemos lo que se narra, entendemos a los personajes, lo que les pasa y sus maneras de dar respuesta a lo que les pasa. Los entendemos, no porque los tengamos cerca, sino porque los tenemos dentro, los sentimos cercanos y razonables. Y después de ese contacto, ya no se puede volver a pensarlos afuera de nosotros. Ya no podemos volver a pensarnos como nos gustaría sin más.